Las palabras de la mujer de Rubén, exmarido de Rosa Peral, que ahora cobran sentido

Rosa Peral vuelve estar en boca de todos. Y es que Albert López ha reconocido el crimen de la Guardia Urbana, uno de los más famosos de la historia de Cataluña. Tal como ha informado El Periódico, Albert López habría admitido haber matado a Pedro Rodríguez junto a Rosa Peral "siguiendo el consejo de su abogado".

Según parece, habría reconocido los hechos para poder obtener beneficios penitenciarios. Actualmente, Albert López se encuentra dentro de un programa individual de tratamiento de reinserción, el cual le ha motivado a reconocer el crimen. ¿Será Rosa Peral la siguiente en dar el paso?

El día que la pareja del exmarido de Rosa Peral contó toda la verdad

Hace unos meses que el programa Vamos a ver de Telecinco hizo pública una carta de la mujer de Rubén, exmarido de Rosa Peral. En ella, Antonia decidía contar toda la verdad sobre el crimen de la Guardia Urbana. Y es que Rosa Peral había acusado a Antonia de dar falso testimonio en el juicio. 

Antonia había declarado que una de las hijas de Rosa Peral había visto que su madre aparecía ensangrentada el día del crimen. Posteriormente, lavó la ropa con lejía y se duchó. Seis años después, y tras visionar el documental de Rosa Peral en Netflix donde aseguraba que se trata de un falso testimonio, Antonia estalló.

La carta de Antonia, la mujer del exmarido de Rosa Peral

"Me veo con la obligación de responder, por alusiones, a las graves y desafortunadas acusaciones que la protagonista hace sobre mi persona", empezaba. Además, también aclaró como era la relación entre ellas antes que se produjera el crimen. "Rosa y yo no nos llevábamos mal, como ella explica".

"Desde que se produjo la desaparición de Pedro y hasta que la detuvieron le mostré mi comprensión y afecto llamándola constantemente. No fue hasta mis declaraciones en el juicio, en las que obviamente sale perjudicada, cuando me convierto, junto con Rubén, en objeto de su ira".

"Rosa da a entender de manera malintencionada que mi declaración es falsa, inventándome un relato para condenarla. No puedo permitir que se me acuse de falso testimonio en un juicio de unos hechos tan graves", sentenció la mujer. Unas declaraciones que ahora cobran sentido.