María Teresa Campos y los múltiples motivos por los que no se casó con Edmundo Arrocet

Edmundo Arrocet ha regresado a España y las dudas vuelven a estar encima de la mesa. La relación que mantuvo con María Teresa Campos lo convirtió en uno de los grandes protagonistas del momento y ahora es el temor de la familia de la presentadora. Pero, ¿por qué nunca llegó a formalizar su relación con María Teresa?

Hay muchas respuestas para la pregunta anterior y en primer lugar debemos hacer referencia al papel que jugó Terelu Campos y Carmen Borrego. Ni una ni otra terminaron de tener una relación plenamente fluida con Edmundo, a pesar de que hicieron un gran esfuerzo. No querían que María Teresa se disgustase y por eso guardaban las apariencias en los programas de televisión.

María Teresa Campos tampoco estaba por la labor de pasar por el altar, a pesar de que se rumoreó que se lo estaba planteando. Es cierto que la posibilidad estaba ahí porque Campos se enamoró profundamente del humorista. No obstante, no quiso dar el paso final, pero dejó claro que sus hijas no tenían nada que ver.

Carmen Borrego prometió que nunca le había prohibido a su madre que se casase con Edmundo. “No creo que nadie tenga que meterse en algo así. Igual que los padres no prohibimos que los hijos se casen, estos tampoco pueden hacerlo con nosotros”, comentó.

Edmundo Arrocet también estaba dispuesto a casarse

Los rumores de crisis entre María Teresa Campos y Edmundo eran una constante en la crónica del corazón. En 2019 llegaron demasiado lejos porque el humorista viajó a Chile sin la comunicadora y el público comenzó a especular. Arrocet explicó que se había marchado con urgencia porque había fallecido un familiar.

Edmundo aprovechó la ocasión para dejar claro que si Campos quería, él estaba dispuesto a darle el ‘sí, quiero’. Sin embargo, la madre de Terelu Campos tenía varias razones para no tomar la iniciativa.

Ya había tenido varios fracasos amorosos y, pese a que dijese lo contrario, tampoco contaba con la aprobación plena de su familia.

“Estamos bien así, pero si Teresita quiere nos casamos, será lo que ella diga”, dijo Arrocet. No obstante, Campos siempre fue una mujer feminista y decidida, así que no le hacía falta el respaldo de nadie. Solamente ella sabe por qué no dio el paso final, pero lo cierto es que no se equivocaba porque su relación no acabó bien.