La confesión de Jesulín de Ubrique sobre su hijo que muchos habían pasado por alto

Jesulín de Ubrique siempre se ha mostrado esquivo con algunos periodistas, pues considera que la prensa está al lado de Belén Esteban. Sin embargo, su aventura en MasterChef Celebrity le ha abierto las puertas de un mundo nuevo y cada vez hace confesiones más interesantes. Hace unas semanas desveló un dato sobre su hijo Hugo que muchos espectadores pasaron por alto.

Jesulín de Ubrique está ofreciendo su cara más amable y ha demostrado ser un buen cocinero. De hecho los seguidores de MasterChef le acusan de ser muy estratega, pero ahora hay otro debate más interesante. El torero confesó el momento exacto en el que concibió a su último hijo, el tercero que tiene con la odontóloga María José Campanario.

Jesulín ha cambiado de estrategia en los últimos tiempos y ya no le interesa hacer ruido en la crónica social. Con sus anteriores hijos protagonizó posados en su revista de cabecera, pero con Hugo no ha seguido la misma norma. María José quiere protegerle y conseguir que sea una persona anónima, de ahí que nunca hable de él en público.

Jesulín se ha saltado las reglas para dar explicaciones sobre un tema privado que en un primer momento había pasado inadvertido. Samantha Vallejo-Nájera bromeó con él sobre sus dotes culinarias.

"Ten cuidado, a ver si viene el quinto hijo", le dijo en tono de humor. Fue entonces cuando el de Ubrique hizo una confesión relacionada con su hijo pequeño.

Jesulín de Ubrique confiesa cómo concibió a su último hijo

Jesulín confirmó que estaba esperando un bebé junto a María José Campanario y los espectadores se quedaron sin palabras. Nadie se esperaba esta noticia, incluso él mismo se sorprendió. En MasterChef ha explicado, haciendo honor a la simpatía que siempre le ha caracterizado, cuando concibió a su hijo pequeño.

"Fuimos de vacaciones unos días, alquilé un catamarán y claro, en alta mar, tranquilito, pues ese niño vino en el catamarán. No lo trajo la cigüeña", le explicó a Samantha Vallejo-Nájera con una sonrisa. "Ese niño es marinero", insiste.

El de Ubrique está centrado en su concurso y por ese motivo las confesiones sobre su vida personal han quedado en un segundo plano. Ha descubierto que en MasterChef tiene una oportunidad perfecta para hacer buenos amigos y la ha aprovechado. Es más, hace unas semanas invitó a sus compañeros a Ambiciones, la famosa finca que compró en 1990.