La idea de Juan Carlos I para separar a Felipe y Letizia se ha vuelto en su contra

Tal y como hemos conocido, Juan Carlos I pasó la Nochebuena en Ginebra con sus hijas, la infanta Cristina y la infanta Elena, y también con los respectivos hijos de estas. Y es que la presencia del rey emérito en Zarzuela es prácticamente inexistente. 

Todo esto estaría motivado por la intención de los reyes de España de desligarse de la imagen que tiene don Juan Carlos I actualmente. Cabe destacar que la relación entre el emérito y la reina consorte no es nada buena que digamos. Durante años se especuló mucho sobre las ideas e intenciones que tuvo Juan Carlos de separar a su hijo de Letizia.

Juan Carlos I nunca terminó de aprobar a Letizia

Durante las últimas semanas, con todo la polémica de Jaime del Burgo, el foco se colocaba sobre este supuesto affaire, dejando muy mal parada a la reina Letizia. Según afirman desde fuera de nuestras fronteras, concretamente desde el periódico The Telegraph, sería el entorno del emérito quien estaría orquestando esta campaña contra Letizia.

Tal y como se sabe, la relación de Juan Carlos y Letizia es nula y es que el emérito nunca llegó a aceptar del todo su entrada en la familia real. Cuando la relación entre Felipe y Letizia comenzaba a tomar forma —hace ya casi dos décadas— Juan Carlos mostró su desaprobación por completo al enlace.

No obstante, Felipe fue tajante, era Letizia o nadie. Finalmente, Juan Carlos tuvo que aceptar a la actual reina consorte dentro de la familia real. Pero, aun así, el emérito nunca terminó de ver con buenos ojos el enlace y muchos menos a Letizia. 

Antes de que trascendiera la supuesta historia entre Jaime del Burgo y Letizia, esto ya vio la luz en 2013, según publica En Blau. Y fue en ese momento cuando don Juan Carlos vio una oportunidad para poder dinamitar el matrimonio. Según asegura el periódico anteriormente citado, el rey emérito llegó a hablar con Letizia sobre este asunto, y le dio muchas facilidades para que abandonara Zarzuela con el fin de esconder ese supuesto affaire. 

Sin embargo, eso nunca llegó a ocurrir. Esa misma idea se volvió en contra del propio Juan Carlos. Esto solo sirvió para que tanto Felipe VI como Letizia se distanciaran aún más de él.

Un año más tarde, en 2014, cuando don Felipe pasó a ser rey y Letizia se convirtió en consorte, las cosas cambiaron desde dentro.

A partir de ese momento, Juan Carlos se alejaba cada vez más de Zarzuela y de la Casa Real, llegando esta a estar únicamente formada por los reyes, la princesa Leonor y la infanta Sofía.

Al mismo tiempo que la imagen del emérito empeoraba en nuestro país, a raíz del sinfín de polémicas que le perseguían, los reyes lo apartaban de la institución.