Elena Furiase, hija de Lolita Flores, revela su etapa más dura: 'Me dio una bajada...'
Elena Furiase sorprende con un conmovedor testimonio sobre su salud mental, confesando el momento más oscuro de su vida
Elena Furiase, conocida por ser hija de la icónica Lolita Flores, ha compartido uno de los momentos más personales y reveladores de su vida. Durante su participación en los Premios Forqué, la artista reflexionó sobre la importancia de visibilizar la salud mental. Un tema que destaca especialmente a raíz de las recientes declaraciones de Bárbara Rey en un especial para Telecinco.
En un encuentro con la prensa, Furiase confesó haber atravesado una etapa muy difícil en su vida. La actriz ha revelado que en ese momento "me dio una bajada muy fuerte" mientras hacía teatro y necesitó recurrir a terapia.
"La terapia me salvó absolutamente", admitió con valentía, invitando a otros a romper con los tabúes en torno a este tema. Este testimonio ha generado un gran impacto, no solo por su honestidad, sino también por su relevancia en un momento en que la salud mental es un tema de debate constante.
Elena Furiase revela su etapa más dura en la que tuvo que ir a terapia
Elena Furiase proviene de una dinastía artística que lleva el arte y la pasión en la sangre. Su madre, Lolita Flores, y su abuela, Lola Flores, siempre han sido figuras públicas admiradas, aunque no exentas de controversias y dificultades. Elena, lejos de quedarse a la sombra de este legado, ha construido su propia carrera en la actuación, combinando su talento con una imagen pública que transmite autenticidad y cercanía.
En este contexto, las palabras de Elena resuenan con fuerza. Al igual que muchos, también ha tenido que enfrentar retos que han puesto a prueba su estabilidad emocional y su bienestar. Sin embargo, su decisión de hablar abiertamente sobre estas experiencias representa un paso adelante en la lucha contra el estigma que rodea a los problemas de salud mental.
Durante su conversación con los medios, Elena detalló cómo logró superar una etapa de "baja" emocional que describió como "una nube negra". Según explicó, este episodio ocurrió mientras trabajaba intensamente en una producción teatral, lo que la llevó a entrar "un bucle muy feo, y en unos pensamientos muy feos".
"Yo estuve yendo a terapia mucho tiempo por un tema que tuve, porque me dio una bajada muy fuerte mientras hacía teatro, me agoté y tuve que ir a terapia durante mucho tiempo", relató.
Elena también enfatizó la importancia de reconocer los síntomas y actuar a tiempo. "Creo que no hay que tener miedo a decir, 'voy a terapia o he ido a terapia', y ya está", comentó.
Furiase también animó a quienes atraviesan situaciones similares a priorizar su bienestar mental y a buscar apoyo sin miedo al juicio social. "Es tan rápido decir, '¡Uy, esta está loca!', pero no es eso. Hay que hablarlo sin tapujos y sin juzgar", agregó, subrayando la necesidad de cambiar la narrativa en torno a estos temas.
La salud mental ha ganado protagonismo en el debate público en los últimos años, pero aún queda mucho por hacer. El testimonio de Elena Furiase es un recordatorio de la importancia de abordar este tema con seriedad y sensibilidad. Su valentía al compartir su experiencia personal inspira a otros a hacer lo mismo, fomentando un diálogo más abierto y constructivo.
Este tipo de conversaciones también evidencian la necesidad de recursos accesibles y efectivos para el tratamiento de trastornos mentales. En palabras de la actriz, "hay que estar al loro con nosotros mismos y con la gente que tenemos cercana".
Elena Furiase se pronuncia sobre el acoso en la industria del entretenimiento
La hija de Lolita Flores también aprovechó la ocasión para hablar sobre el acoso en el mundo del entretenimiento, un problema que, lamentablemente, afecta a muchas mujeres en diferentes ámbitos. Aunque aseguró no haber sufrido este tipo de situaciones de forma directa, reconoció que conoce casos cercanos y reafirmó la necesidad de denunciar siempre.
"El abuso y el acoso son realidades que deben enfrentarse, no solo en nuestra industria, en muchísimas otras industrias", declaró con firmeza. También destacó que, aunque los porcentajes son alarmantemente altos entre las mujeres, el acoso también afecta a hombres y niños, lo que hace que sea un problema de alcance generalizado.
"Da igual que hayan pasado un mes, dos meses, cuatro años, cuando una tenga la fuerza, pero por supuesto que hay que denunciarlo y se tiene que parar de alguna forma", concluyó Furiase.
El testimonio de Elena Furiase no solo arroja luz sobre la importancia de la salud mental, sino que también nos invita a reflexionar sobre cómo podemos apoyar a quienes nos rodean. En una época en que el ritmo de vida puede ser abrumador, su mensaje de esperanza y resiliencia resuena con más fuerza que nunca. La valentía de la actriz al compartir su historia demuestra que hablar abiertamente de nuestras luchas es un paso crucial hacia la superación.
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