El cambio en la vida económica de Toño Sanchís que deja sin palabras a Belén Esteban

Toño Sanchís ha vuelto a la vida de Belén Esteban por la puerta grande. Y es que según hemos podido conocer esta semana, el que fuese su representante estaría ganando mucho dinero.

Concretamente, porque sigue vinculado al mundo audiovisual, además de representar a varios famosos como Cristóbal Soria.

"Eso es bueno saberlo, para mis abogados", ha comentado Belén Esteban. "Yo sé todo, y ellos también", ha advertido la de Paracuellos.

Durante muchos años, Belén Esteban consideró a Sanchís como su mano derecha y casi un hermano. 

Es más, confiaba tanto en él que le cedió el control absoluto sobre sus finanzas. Una situación que cambiaba por completo después de que Esteban ganase GH VIP y decidiese donar el premio por completo a la caridad.

"Dono el premio a Sor Lucía, al Padre Ángel, a Cáritas y al hijo de mi compañera Lola, que tiene parálisis cerebral", anunciaba Belén muy emocionada en la gran final.

Sin embargo, a Toño Sanchís esta decisión no le hizo ninguna gracia, ya que suponía perder nada menos que 100.000 € y su consecuente comisión.

Belén Esteban recibe una importante noticia sobre Toño Sanchís

Y a eso se suma que, en un arrebato, Toño le contó a su representada que su pareja, Miguel Marcos, le había sido infiel mientras ella concursaba en el reality.

"Miguel va a por ti, no te perdona que me contaras que había estado con otra", le habría advertido completamente furiosa Esteban.

Algo que supuso apenas un primer paso dentro de lo que se convirtió en una eterna batalla legal entre ambos.

Poco después, Belén Esteban descubría que Toño llevaba mucho tiempo robándole dinero. Y, en el juicio, quedó reflejado que se había apropiado indebidamente del dinero de la entonces estrella de Telecinco.

Así, Belén Esteban tomaba la decisión de presentar una demanda en la que le reclamaba unos 600.000 €.

Aunque, en realidad, la suma podría estimarse en nada menos que 1,5 millones de euros. De pronto, Belén se dio cuenta de que ni siquiera sabía cuánto dinero tenía en el banco, ya que era Toño quien se ocupaba de sus asuntos económicos.

Al parecer, Toño Sanchís se estaba apropiando de un porcentaje mayor del acordado, sin que su representada ni siquiera estuviese al tanto. 

De hecho, y al no poder hacer frente en un primer momento a la deuda con Hacienda, Belén estuvo a punto de perder dos de sus queridas propiedades.

Es más, la Agencia Tributaria procedió a embargarle su chalet de Paracuellos y también el piso que posee en el barrio de San Blas. 

Ahí, se rompían de golpe diez años de profunda amistad. "He llorado tanto que la palabra que me viene es tristeza", se lamentaba Belén.