El giro de 180 grados que dará el tiempo en Cataluña el fin de semana: ya tocaba

El buen tiempo está llamando a la puerta en Cataluña. Estos días tan esperados por muchos podremos disfrutar de un ambiente más veraniego. Según han informado desde el Meteocat, la tendencia meteorológica es de clara mejora en las próximas horas, con un ambiente mucho más estable.

Hablamos de un vuelco en toda regla con el tiempo que dominaba los mapas hasta ahora. Las lluvias y tormentas de los últimos días desaparecerán de la mayor parte de Cataluña. Tan solo hablaremos de chubascos en algunas zonas muy concretas.

Descargarán sobre todo en el Pirineo, donde se espera que vuelvan a aparecer algunas tormentas por la tarde. De todas formas, no hay activa ninguna alerta, lo que indica una menor intensidad de las mismas. Una situación que contrasta con la de esta semana, cuando hemos tenido avisos amarillos y naranjas en muchas comarcas.

Subida de las temperaturas en el conjunto de Cataluña

En el resto de Cataluña el sol hará acto de presencia y ayudará a que las temperaturas empiecen a cambiar. En este sentido, tal como han avanzado desde el Meteocat, los termómetros empezarán a subir para ajustarse a lo esperado en esta época del año.

Cosa que no ha pasado durante esta semana, ya que las mañanas han sido realmente frías. En puntos del territorio como Ponent se registraron mínimas de seis grados y en el Pirineo bajaron hasta rozar los cero.

No pasará lo mismo este fin de semana, porque tendremos un ambiente mucho más primaveral que hará que se sienta, por fin, que estamos casi en verano. No obstante, este panorama no será más que de transición, porque la semana que viene se esperan de nuevo las lluvias.

Previsión para la semana que viene

Todavía no hay una previsión concreta, pero sí que se espera que la media de precipitaciones se sitúe por encima de lo habitual. Aun así, habrá que esperar y analizar cómo evoluciona la previsión.

Hasta el momento, lo que sí se puede afirmar es que este miércoles se vivió una tarde pasada por agua. Tanto que los niveles del pantano de Sau subieron de forma considerable, igual que el caudal del río Ter. La sequía empieza a despedirse y el verano ya hace acto de presencia.