Hacienda lanza una advertencia a todos los padres que quieren donar dinero a sus hijos

Es común que los padres, especialmente aquellos cuyos hijos ya son mayores y cuentan con una economía propia, quieran apoyarlos financieramente en momentos importantes. Ya sea para ayudar con la compra de un coche, cubrir la entrada de una vivienda o en cualquier otra situación significativa.

Aunque se trata de un gesto familiar y extendido, Hacienda no es ajena a estas transferencias de dinero. Al fin y al cabo, se trata de una donación, y Hacienda quiere asegurarse de que su parte quede registrada y pagada.

Toda donación, sea en forma de dinero, fondos de inversión, acciones u otros bienes no inmuebles, debe ser declarada en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. Este impuesto varía según la comunidad autónoma en la que resida el beneficiario.

Aunque muchos no lo tengan en cuenta, es imprescindible presentar este impuesto, especialmente si la cantidad donada es significativa. No hacerlo supone asumir un riesgo innecesario de sanciones por parte de Hacienda.

¿Cuánto se paga a Hacienda? Las bonificaciones que existen

En muchas comunidades autónomas, existe un alivio fiscal importante para donaciones de padres a hijos. Son bonificaciones que hacen que los impuestos a pagar sean bajos o incluso inexistentes en algunos casos.

Sin embargo, para beneficiarse de estas bonificaciones, es necesario seguir ciertos pasos clave y formalizar la donación. En primer lugar, es fundamental presentar la declaración del impuesto de Sucesiones y Donaciones. Debe hacerse dentro de los 30 días hábiles desde el momento en que se realiza la donación.

Además, las donaciones de dinero deben ser formalizadas en un documento de escritura pública, asegurándose de que el origen de los fondos esté debidamente justificado. Esto garantiza que Hacienda no tendrá motivos para cuestionar la legalidad de la transferencia.

Uno de los documentos esenciales para evitar problemas fiscales es el modelo 651 de Hacienda, que debe completarse y presentarse ante la administración pública. En este documento se incluyen todos los detalles de la donación, y su presentación debe realizarse dentro del plazo legal de 30 días hábiles desde que la donación queda registrada.

Si Hacienda detecta que se ha recibido una suma importante de dinero cuyo origen no puede ser debidamente justificado, la situación podría complicarse para el beneficiario.

En ese caso, Hacienda podría considerar el dinero como una "ganancia patrimonial no justificada". Esto obligaría a tributarlo en el IRPF al tipo marginal, que en algunas comunidades autónomas puede llegar hasta el 56%. Además de esto, el beneficiario también se enfrentaría a las sanciones correspondientes por no haber declarado la donación adecuadamente.