Montaje del monasterio de Sant Miquel del Fai y una chica sorprendida señalándolo
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La iglesia que fascina a los extranjeros y puedes visitar totalmente gratis

La iglesia está inmersa en un entorno natural que hace que visitarla se convierta en toda una experiencia

Barcelona esconde un enclave mágico que ha permanecido en gran parte desconocido para los catalanes. Hasta que recientemente ha atraído la atención de National Geographic y todo ha cambiado. Se trata de la iglesia de Sant Miquel del Fai, una joya histórica oculta entre formaciones rocosas y exuberante vegetación.

Con referencias que se remontan al 878, esta iglesia ha sido un refugio espiritual y un punto de interés a lo largo de los siglos. Sin embargo, su acceso no ha sido fácil, incluso en la era moderna, requiriendo cierres temporales para mejoras. Fue hasta abril de 2023 que se reabrió la iglesia después de trabajos de acondicionamiento debido a la erosión natural de la montaña.

La iglesia que no deja indiferente a nadie

Aunque la entrada a la iglesia de Sant Miquel del Fai es gratuita, se requiere reserva previa debido a las limitadas visitas permitidas. De esta forma, se asegura una experiencia exclusiva para quienes se aventuran a descubrirla, según ha destacado Crónica Directo.

El acceso al recinto también implica un breve paseo desde el aparcamiento, atravesando un puente histórico sobre el río Rossinyol. Esta infraestructura data de 1592 y ofrece una vista impresionante del entorno natural que lo rodea.

Una vez dentro, los visitantes son recibidos por una vista panorámica espectacular. Cascadas ocultas, grutas y una frondosa vegetación que crean un ambiente de ensueño en el monasterio de Sant Miquel del Fai.

El recorrido incluye la antigua Casa Prioral, que en el pasado recibió a figuras ilustres como Lord Byron, George Sand y Josep Pla. Todos ellos dejaron su huella en este lugar histórico.

Sant Miquel del Fai es un Bien Nacional

Sant Miquel del Fai fue reconocido como Bien de Interés Nacional en 2017 por la Generalitat de Cataluña, destacando la importancia de sus elementos arquitectónicos y naturales. Se incluyen la ermita de Sant Martí del Fai, la iglesia troglodita de Sant Miquel del Fai, entre otros.

Además de su rica historia, el entorno de Sant Miquel del Fai ofrece oportunidades para los amantes del senderismo. Todo ello gracias a la cercana riera de les Tenes, que esconde refrescantes pozas, ideales para disfrutar durante el verano.

En definitiva, el monasterio de Sant Miquel del Fai se presenta como un tesoro natural y cultural que cautiva a quienes se aventuran a descubrirlo. Ofreciendo una experiencia única que combina historia, naturaleza y aventura en un entorno impresionante a poca distancia de Barcelona.

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